Hoy en día, todos somos conscientes de la importancia del cuidado de nuestra piel. Es el órgano más grande de nuestro cuerpo y, por supuesto, el que está en mayor contacto con el exterior. Eso significa que su cuidado debe ser aun más precavido, teniendo en cuenta que las agresiones sobre nuestra piel son directas. Si tu también estas interesado en este ámbito, no te vayas. Hablamos sobre el poder de los aceites corporales y analizamos sus beneficios. Además, recuerda que en Escuela ELBS podrás formarte en este sector.
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Aceites corporales: qué son y para qué se usan
Los aceites corporales son un producto cosmético especialmente diseñado para nutrir al máximo la piel de nuestro cuerpo. Su principal efecto sobre nuestra dermis es la hidratación profunda que le proporciona. Una característica que, pensarás, también nos aportan las cremas hidratantes de toda la vida.
Sin embargo, los aceites corporales ofrecen una gran cantidad de beneficios que están consiguiendo que los amantes de este producto sean cada vez más. Y es que, además de hidratarnos, el aceite corporal puede ser también perfecto para combatir problemas cutáneos o estéticos.
Por ejemplo, algunos aceites corporales nos pueden ayudar a proteger la piel de los rayos solares o de la sequedad a causa del frío del invierno. Asimismo, también podremos encontrar productos especializados en otros ámbitos: combatir la celulitis, eliminar cicatrices, reducir estrías o reafirmar nuestra piel
Asimismo, los aceites corporales pueden incorporarse en nuestra rutina de autocuidado diario, convirtiéndose no solo en un ritual de cuidado de la piel. Sino siendo también nuestro momento de bienestar y relajación.
¿Para qué sirve el aceite corporal?
Además de hidratar y nutrir la piel, hay otros usos del aceite corporal dentro de la rutina de cuidado personal. Veamos algunos de los más destacados:
- Sellar la hidratación después de la ducha. Aplicarlo sobre la piel ligeramente húmeda ayuda a crear una barrera que evita la pérdida de agua. De este modo, tu piel se mantiene hidratada durante más tiempo sin necesidad de reaplicar productos.
- Masajes relajantes o descontracturantes. Su textura facilita el deslizamiento de las manos, lo que reduce la fricción durante el masaje y potencia la sensación de relajación. Además, muchos aceites incluyen ingredientes aromáticos que favorecen el bienestar emocional.
- Prevenir la fricción durante el ejercicio. Una pequeña cantidad en zonas sensibles (muslos, axilas o ingles) ayuda a evitar rozaduras cuando haces deporte o llevas ropa ajustada durante varias horas.
- Potenciar el bronceado y dar un efecto luminoso. Algunos aceites aportan un acabado satinado inmediato, ideal para resaltar el bronceado o para ocasiones en las que buscas que la piel se vea más viva y uniforme.
- Como tratamiento antes o después de la depilación. Antes, suaviza el vello y la piel para reducir la irritación. Después, ayuda a calmar la zona y evitar la aparición de pelos enquistados si eliges un producto con ingredientes calmantes.
- Cuidado de uñas y cutículas. Aplicarlo en cutículas secas o uñas quebradizas les aporta elasticidad y refuerza su aspecto, ayudando a que la manicura dure más tiempo.
- Aromaterapia para reducir el estrés. Si eliges aceites corporales con aceites esenciales naturales (como lavanda o eucalipto), podrás utilizarlos en tu rutina nocturna para inducir calma y favorecer el sueño.
- Para mezclar con tu crema habitual. Si sientes la piel extra seca, añade unas gotas a tu crema corporal. Esto potencia el nivel de nutrición sin cambiar la textura del producto que ya te funciona.
5 motivos por los que elegir los aceites corporales
Es posible que pienses que si ya usas la crema hidratante, no tienes por qué cambiar tu rutina de cuidado de tu piel. Nosotros, sin embargo, te explicamos los 5 principales motivos por los que deberías darles una oportunidad a los aceites corporales. Toma nota:
1-. Ácidos grasos y antioxidantes
Los aceites corporales pueden contener algunos nutrientes para la piel tales como aceites grasos (omegas 3, 6 y 9) y vitaminas (A, C y E). Sobre todo cuando están compuestos de frutos secos y otros vegetales que nos proporcionan estos nutrientes para la piel. Estos nutrientes naturales refuerzan el efecto nutritivo de los aceites corporales con propiedades antioxidantes y antiedad. Además, como veremos más adelante, los antioxidantes y productos que nos proporcionan estos aceites son de origen natural. Lo que suele ser más respetuoso con nuestro
2-. Efecto relajante
Además de darle nutrientes específicos a tu piel según tus necesidades, el aceite corporal también te ayudará a relajarte. Puedes incluirlos en tu rutina diaria, por ejemplo, asignándole un papel de relajación y de autocuidado. Lo mejor es aplicar el aceite sobre la piel limpia, por lo que te recomendamos que lo apliques tras la ducha.
Así, puedes añadir este paso en tu rutina diaria como un momento relajante. Aplica el aceite siempre dando un pequeño masaje en forma circular y, en caso de querer que sea más relajante, presiona ligeramente sobre tus músculos.
3-. Nutrición profunda
Los aceites suelen ser muy hidratantes y más si eliges los que contengan productos especialmente diseñados para nutrir la piel. En este sentido, asegúrate de cuál es tu tipo de piel, pues aunque no lo creas existen aceites corporales para pieles sensibles, para pieles secas e incluso, aunque te cueste de creer, para pieles grasas. Cada uno de ellos contiene diferentes elementos y productos.
Además, la textura del aceite es muy parecida a la de los lípidos naturales de nuestra piel, por lo que este producto consigue que el efecto de nutrición e hidratación sea mucho más duradera, reparadora y profunda. Finalmente, gracias a esta estructura molecular, los aceites corporales tienen mayor capacidad de hidratación en el tiempo, pues permanecen más tiempo sobre nuestra piel.
4-. Cunden más
Su formato en aceite hace que su extensión por nuestra piel corporal sea mucho más fácil y fluida. De este modo, apostando por los aceites cubrimos nuestra piel corporal de manera más fácil con utilizando menos producto. Dicho de otra manera, los aceites corporales suelen cundir más que las cremas hidratantes, de las que necesitas más producto para cubrir todo tu cuerpo.
5-. Productos naturales
Si buscas una alternativa natural para hidratar tu piel, seguramente los aceites corporales cumplirán tus expectativas. Aunque hoy en día puedes también encontrar su versión química, una de las principales características de estos productos es que están hechos de manera orgánica. Es decir, los componentes son extractos y aceites de diferentes frutos, flores o frutos. Estos los convierten, de este modo, en un producto libre de químicos y completamente naturales.