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La piel es el órgano más grande del cuerpo humano. Tan tan grande que recubre todos los rincones de nuestro cuerpo. Aunque muchas veces no le demos la importancia que tiene, esta es una parte muy relevante del cuerpo. La piel es órgano que nos protege más directamente de cualquier agresión externa. Por ello, tener una piel radiante y saludable es de vital importancia. Si tú también estás buscando mayor información sobre cómo conseguirlo, quédate. Hoy te explicamos qué pasos debes seguir para conseguir una piel radiante. Además, recuerda que en Escuela ELBS podrás formarte en ello estudiando nuestro Máster en Dermofarmacia y Formulación Magistral. Consigue ahora tu certificación experto y dedícate profesionalmente a lo que más te apasiona.

Cómo conseguir una piel radiante

Si has llegado hasta aquí es que estás interesada o interesado en conseguir una tez limpia, brillante y sana. Conseguir una piel radiante no es imposible, pero tampoco podemos decir que tenemos el secreto para todo el mundo. Y es que la piel es única en cada persona y, mientras hay quienes consiguen una piel radiante sin apenas seguir ningún tratamiento, otros requieren de acompañamiento médico y farmacológico.

Así que lo primero que debemos remarcar es que cada persona es un mundo y que, por lo tanto, antes de empezar ninguna rutina o tratamiento, acudas a un médico que pueda evaluar tu caso concreto. Aun así veamos a continuación qué consejos puedes seguir para contribuir muy positivamente en tu camino para conseguir una piel radiante. Toma nota.

10 consejos para mejorar tu piel

Mejorar el aspecto de tu piel puede ser positivo para ti en muchos aspectos de tu vida. No solo porque mejorarás tu aspecto físico. Sino también es positivo para mejorar tu estado de salud en general. Recuerda que tu piel es el órgano que está más expuesto a las agresiones externas y la barrera protectora más grande de la que disponemos para protegernos. De ahí que cuidar de ella y conseguir una piel radiante sea tan importante.

1-. Bebe agua

Y no para hidratarte por fuera, sino también para hidratarte por dentro. Beber entre un litro y medio y dos litros de agua al día te resultará no solo beneficioso para tu cuerpo en general. Sino también para conseguir una piel radiante. Mantenerte hidratado te ayuda a reponer tejidos, proporcionándole elasticidad e hidratación también a la piel.

2-. Hidratación, clave

En el otro sentido de la palabra encontramos también la importancia de hidratar por fuera la piel. Es decir, utilizando productos cosméticos hidratantes especialmente diseñados para nuestro tipo de piel. Busca una crema hidratante que se adapte a ti y que también tenga en cuenta el tiempo del exterior donde vivimos.

3-. Adapta tu dieta

Sí, lo habrás oído hasta la saciedad e incluso puede que dudes de la importancia de adaptar tu dieta para tener una piel radiante. Pero lo cierto es que tiene mucha más relevancia de la que crees. Una alimentación correcta tiene un papel muy importante en la salud e imagen de una piel radiante y sana. En este sentido, gracias a unos patrones dietéticos correctos y nutritivos podemos mejorar muchísimo el aspecto de nuestra piel.

4-. Usa siempre protección

Te preguntarás, ¿Incluso en invierno? ¡Sí! La repuesta es un rotundo sí, sea cual sea la circunstancia. Proteger la piel de los rayos solares durante todo el año es una muy buena idea. Y es que el impacto de estos rayos en nuestra piel puede hacer que envejezca, pierda elasticidad y sufra de manchas e imperfecciones mucho antes.

5-. Toalla suave, piel radiante

No solo tienen impacto en nuestra piel los productos cosméticos y las rutinas de belleza que aplicamos. También influyen en la salud de nuestra tez las toallas o productos que usemos en estas rutinas. Por eso, elije siempre una toalla suave y nunca la restriegues por la cara y la piel. Respétala secando tu cara y cuerpo mediante pequeños toquecillos.

6-. Relájate y descansa

El descanso y la desconexión son muy relevantes si quieres lucir una piel radiante y sana. Nuestra piel suele ser muy sensible al estrés, el cansancio y la ansiedad. Por ello, es una de las partes de nuestro cuerpo que más afectada se ve ante estos problemas. Busca una actividad que te permita desestresarte y desconectar la mente.

7-. Cuida de tus hábitos

Sí, hemos hablado del agua que bebes, la crema que usas o el nivel de estrés que aguantas. Controlar todos estos factores podría ayudarte a conseguir una piel radiante. Pero hay otros factores y hábitos que influyen igualmente en el bienestar y aspecto de tu piel. Por ejemplo, el tabaquismo se asocia al envejecimiento prematuro. Lo mismo con el abuso del maquillaje, que podría ocasionar problemas e imperfecciones si no se retira de manera eficaz.

8-. Muévete más

Quien más y quien menos ya sabe que el deporte es beneficioso para todos o prácticamente todos los casos y problemas de salud. En cuanto a conseguir una piel radiante, el deporte también tiene su influencia. Como no podía ser de otra manera, prioriza siempre una vida activa frente al sedentarismo.

9-. Rutina de cuidado facial

No tener ni seguir una rutina de cuidado facial de manera constante podría ser uno de los errores que te impide conseguir una piel radiante. Te aconsejamos que busques un profesional de la demrofarmacia que pueda asesorarte en cuanto a tu rutina de cuidado facial y corporal. Y una vez la tengas, no la dejes. La constancia es de vital importancia.

10-. Cuidado con los productos abrasivos

Usamos muchos productos cosméticos que podrían resultar perjudiciales para nuestro rostro y piel si no prestamos atención. Por ejemplo, debemos estar atentos a nuestro perfume o colonia, evitando que nos caiga este producto en la cara. Podrían envejecer o manchar nuestra piel si lo usamos regularmente.