La constante productividad aprendida que nos obliga a pensar siempre a futuro, también nos ha llevado a buscar herramientas que nos recuerden cómo regresar a la calma y a la tranquilidad del momento presente. El mindfulness para principiantes es unos de los mejores métodos para gestionar el estrés y alcanzar un mayor nivel de bienestar. Aunque puede resultar complicado empezar a aplicarlo, una vez que lo practiques por un tiempo prolongado, podrás ver los beneficios que ofrece este ejercicio. Por ello, hoy te explicamos algunas claves para adentrarte al mundo del mindfulness de manera más fácil.
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Índice de contenidos
¿Qué es el mindfulness para principiantes?
El mindfulness para principiantes es una práctica de atención plena que consiste en prestar atención deliberada al momento presente sin juzgarlo ni dejarse llevar por pensamientos o emociones. Es una técnica de meditación y conciencia que tiene sus raíces en las enseñanzas budistas, pero que se ha vuelto cada vez más popular debido a sus beneficios para la salud mental y emocional.
El objetivo del mindfulness es aprender a estar consciente de cada experiencia presente, ya sea que estemos comiendo, caminando, trabajando o simplemente sentados. En lugar de vivir en el pasado o preocuparnos por el futuro, el mindfulness nos invita a centrarnos plenamente en el ahora, en el presente, sin distraernos por pensamientos intrusivos o preocupaciones.
Para los principiantes, el mindfulness a menudo comienza con ejercicios simples de respiración, donde se presta atención a la respiración y se regresa a ella cada vez que la mente divaga. A medida que se adquiere más experiencia, la práctica puede ampliarse a la observación consciente de los pensamientos, emociones y sensaciones físicas sin involucrarse emocionalmente con ellos.
¿Por qué practicar el mindfulness para principiantes?
Empezar a practicar mindfulness o atención plena puede traerte multitud de ventajas y beneficios. No solo porque aprenderás maneras de hacer frente al estrés y la ansiedad de nuestro día a día. Sino también porque te ayudará a adoptar un estilo de vida más pausado, centrado en la vida y no en la inercia. Veamos algunos motivos a continuación:
1-. Se trabaja a la persona de manera integral. Los beneficios que obtenemos de practicar mindfulness se extienden en horizontal y vertical en ejes claves del ser humano como la salud mental, las relaciones sociales que experimenta, la felicidad que siente, la salud física o el trabajo que realiza.
2-. Todos podemos practicarlo. No es una práctica exclusiva de ningún colectivo. Tanto el mindfulness para principiantes como su práctica avanzada es de acceso universal y reporta beneficios en prácticamente todas las personas que lo realizan.
3-. Menos dolor. El dolor físico o mental existe y no podemos evitarlo. Asumir esta premisa es de vital importancia en la vida. Sin embargo, el mindfulness nos ayuda a gestionar nuestras emociones respecto al dolor. Es decir, gracias a la atención plena aprendemos a aceptar el dolor (Físico o mental) para saberlo transitar sin sufrimiento.
4-. Menos estrés y ansiedad. El mindfulness es útil para reducir la ansiedad y el estrés. Todo ello no solo tiene beneficios directos sobre nuestra salud mental, sino que tiene repercusiones indirectas en muchos otros ámbitos de nuestra vida.
5-. Más atención. Lo dice el mismo nombre, los ejercicios de atención plena nos ayudan a tener más atención y concentración. Con esto podemos aumentar nuestra capacidad de toma de decisiones.
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5 consejos de mindfulness para principiantes
El mindfulness para principiantes no requiere de ninguna habilidad previa y puede practicarse en cualquier momento y lugar. Comenzar con sesiones cortas y ser consistentes en la práctica gradualmente puede conducir a una experiencia más profunda y beneficios a largo plazo. A continuación, te dejamos 5 pasos o consejos con los que puedes empezar a practicar mindfulness para principiantes. Toma nota.
1-. Busca un lugar
Busca un lugar que puedas hacerlo “tuyo”. Un espacio en el que puedas instalarte para practicar mindfulness, sin interrupciones, sin ruido excesivo y que te transmita buenas vibraciones.
2-. Elige un momento del día
El cuándo también es importante para ponerte a empezar a practicar atención plena. Lo cierto es que, si eres principiante, lo más recomendable es que empieces a practicarlo a primera hora de la mañana o, en caso de no poder, a última hora antes de ir a dormir.
El mindfulness puedes practicarlo a cualquier hora, pero si eres nuevo en ello, tu mente estará más “despejada” durante estas franjas horarias.
3-. Prepara tu postura
Busca una postura sentada cómoda. Algunas personas prefieren sentarse en el suelo, otras en una silla. Lo importante es que puedas mantener la espalda recta y mantener el mentón ligeramente ‘caído’, o relajado.
4-. Empieza con tus primeros ejercicios
Pon en práctica tus primeros ejercicios de mindfulness para principiantes. Es probable que al principio te cueste y tengas tentación de desistir. Sin embargo, te recomendamos que te “obligues” a cumplir con el tiempo que te hayas propuesto. Puedes empezar por ejemplo, con una respiración de atención plena, observando cómo entra el aire en tu cuerpo y cómo sale.
5-. Deja que fluya
Es normal que los pensamientos sucedan y aparezcan durante tus prácticas de mindfulness para principiantes. Lo cierto es que nuestro cerebro necesita un tiempo de descanso, pero sigue produciendo ideas y pensamientos constantemente. Simplemente, cuando lleguen, deja que se vayan. No los analices, ni les prestes atención: volverán cuando no medites y ya podrás atajarlos.
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